Daryll Rowe, de 27 años, fue condenado a cadena perpetua luego de ser encontrado culpable de transmitir de forma deliberada el virus de inmunodeficiencia humana (VIH) a 10 hombres que conoció en Grindr. Esta condena representa el primer caso de una persona sentenciada por transmitir el virus con conciencia sobre el hecho.
En abril de 2015 a Rowe se le diagnosticó VIH; durante octubre de ese año y febrero de 2016 mantuvo relaciones sexuales con diferentes hombres en tres ciudades de Inglaterra.
Dos víctimas dieron testimonios a la policía que contenían coincidencias, así fue como los oficiales emprendieron una búsqueda de Rowe, hasta que lo detuvieron.
Las víctimas, que denunciaron los hechos en un juicio que duró seis semanas, dijeron que Rowe insistía en tener relaciones sexuales sin protección, pues alegaba que estaba “limpio”, mientras que en otras ocasiones manipuló los condones (los rompía o se los quitaba a escondidas).
Luego de haber transmitido el VIH a sus víctimas, les envió mensajes en donde se burlaba de ellos, uno de los textos decía: “Tal vez tienes fiebre… Tengo VIH, LOL. ¡Ups!”, otro más aclaró “Rompí el condón. Te tengo”.
Rowe no mostró ninguna emoción cuando la fiscal, Caroline Carberry, leyó nueve testimonios de sus 10 víctimas, en los cuales, según la jueza, se mostraban “las devastadoras consecuencias” de sus actos.
Por su parte, la jueza Christine Henson calificó los actos de Rowe como “una determinada campaña violenta y maliciosa”, por lo que fue sentenciado bajo el delito de “lesiones graves con intención de dañar la salud” en contra de cinco hombres y por intentar hacerlo con cinco más.
“Muchos de esos hombres eran hombres jóvenes de unos 20 años en el momento en que tuvieron la desgracia de conocerte. Teniendo en cuenta los hechos de este caso y su comportamiento permisivo y predatorio, no puedo ver cuándo ya no sería un peligro para los hombres homosexuales. En mi opinión, las ofensas, tomadas en conjunto, son tan graves que una cadena perpetua está justificada”, dijo la jueza en el momento que sentenció a Rowe a cadena perpetua.
Una de las víctimas comentó en el juicio que Rowe representa una amenaza para la sociedad; además, lo calificó como sociópata. Otra de las víctimas, cuyos padres fallecieron a causa de sida cuando era niño, comentó: “Una parte de mí murió el día que me diagnosticaron. El viejo yo ya no está. Me han devastado las acciones de Rowe, y quiero asegurarme de que esto no le pase a nadie más”.
Durante el juicio, Rowe comentó que ignoró los consejos médicos para un tratamiento y en su lugar bebía su orina y lo complementaba con remedios naturales; además, dijo que creía que ya se había curado del VIH cuando comenzó a tener relaciones sexuales con los hombres que, como él, son VIH positivo.
Con información de Telegraph y The Guardian. Imagen tomada de GCN. (DesastreMX)
