Ciudad de México. Por: Christian Ramírez.- Posiblemente el homenaje más importante a un artista mexicano destacado en la historia del país, fue el que se realizó este lunes en el palacio de Bellas Artes, en honor al compositor y cantante, Juan Gabriel.
Hasta el momento más de 450 mil personas se han dado cita para despedir al Divo, las cenizas arribaron al recinto cultural a las 4:15 de la tarde del lunes. Al momento de la llegada, los aplausos, las canciones, el llanto, la nostalgia, y a la vez la alegría, se reflejaba en el rostro de quienes fueron a decir adiós, a quien le pusiera música y letra al alma de México.
Familia y gente de todas las edades se observaban en Bellas Artes, fotografías y discos del cantante, en todos los formatos eran llevados como recuerdo, miles de flores fueron dejadas en el lugar.
En restaurantes, comercios, transporte público, prácticamente la música de Juan Gabriel se escuchaba en cada rincón de la capital mexicana.
“Duré seis horas formada, dije en mi trabajo que estaba enferma, la verdad fue muy triste ver a mi cantante favorito de esa manera, en cenizas, lloré y ahora voy a cantar hasta que termine este concierto”, dijo Manuela, quien fue una de las miles de fanáticas que acudió a dar el último adiós y quien se unía a los miles para corear, Te lo pido por favor, Hasta que te conocí, Amor Eterno, entre otras.
De un momento a otro, entre las 4 y las 7 de la noche del lunes, la alameda central, donde la gente tenía que formarse para pasar junto a la urna de los restos del intérprete fue insuficiente, y la fila se incorporó a la avenida Juárez.
Una vez que fue colocada la urna cuadrada de madera sobre un pedestal negro, instalado en el lobby de Bellas Artes, cantantes como el tenor Fernando de la Mora y Aída Cuevas comenzaron a entonar las canciones de Juan Gabriel mientras sus fans, muchos de ellos llorando, comenzaron despedirse con flores y pequeños carteles de su ídolo en mano.
Además de las lágrimas, el baile junto a imitadores comenzó a encender el ambiente a uno de fiesta y algarabía.
Pese a la amenaza de lluvia la gente no dejaba de llegar, en los edificios laterales también decenas de personas se podían apreciar observando el arranque del homenaje en el máximo recinto de la cultura mexicana, en cuyos muros de mármol italiano, resonó varias veces la voz del popular cantante Juan Gabriel.
Gente de Colombia, Argentina, España, Estados Unidos, Panamá, Chile, Ecuador y Estados diversos de la República Mexicana acudieron a este homenaje fiesta, cuando los cantantes comenzaron a cantar, el coro en avenida Juárez y eje central se unía a la voz de los intérpretes.
Hablamos también con Don Eduardo, quien acudió desde Sacramento California, y persona que conoció a un joven Juan Gabriel a finales de la década de 1960, alrededor del año 68, nada más ni nada menos que al interior del Noa Noa.
“Un muchacho muy saludador (Juan Gabriel), yo iba con frecuencia, pasaba de Texas, de la casa de un hermano que vive ahí a Ciudad Juárez, yo lo llegué a escuchar en ese bar nada más que al dueño no le gustaba porque era en ese entonces menor de edad, yo lo ví unas tres o cuatro veces, llegué a platicar con él y de repente desapareció, hasta inicio de los setenta, cuando se hizo famoso con la canción de No tengo Dinero, y de ahí pues artista de la música que fue, no pensé que fuera a ser tan famoso, aunque para mi gusto me gustan más las canciones de antes”, relató el señor de aproximadamente unos 70 años de edad, quien por cierto vino solo a eso, a la Ciudad de México, al homenaje.
En la fila muchos coincidieron que lo que duele, es que ya no habrá quien escriba tantas canciones que ‘tocaron el alma de millones’, pero agradecen el legado, de quienes consideran a Juan Gabriel como el compositor más prolífico de todos los tiempos.
El Homenaje se extenderá hasta la tarde de este martes, en donde se sabe que a las siete de la noche los restos de Alberto Aguilera serán trasladados a Ciudad Juárez, donde descansaran en la casa que en vida le relegará a su madre.