Celaya, Gto., por: Redacción.- Como desafortunadas y precipitadas calificó el Obispo de la Diócesis de Celaya, Victor Alejandro Aguilar Ledesma, las declaraciones del presidente Andrés Manuel con relación a que los jóvenes estudiantes fueron asesinados por ir a comprar droga.
Monseñor dijo que no deben lucrar con el dolor.
«Creo que fue una declaración desafortunada, todavía si no había ni las investigaciones creo que fue precipitada también, no había hecho una investigación, no es fácil que de un día para otro se sepa cuál es la causa, entonces me parece que es desafortunada, precipitada y creo que descontextualizada».
«Yo lo que diría es que todas esas circunstancias no se politicen, yo creo que no se vale politizar el dolor y el sufrimiento humano. Y que no está permitido que todos los medios, que ellos concurran para un fin.
«El fin no justifica a los medios, es decir, creo que aunque se busque el poder y aunque busquen la gubernatura o se busque la presidencia, no se vale lucrar con el dolor y el sufrimiento humanos».
Monseñor dijo que la población no debe vivir con miedo ni abandonar los espacios públicos.
«Contamos con la presencia de Dios, él nos cuida y de la mano de María podemos continuar aún en medio de las dificultades, seguir cumpliendo nuestros deberes todos porque tenemos que seguir adelante. No podemos dejar los espacios ni los públicos ni ningún otro espacio a la delincuencia. La sociedad, las calles, las escuelas, las iglesias nos pertenecen a nosotros y hay que seguir ocupando los lugares que nos pertenecen».
Monseñor presidió la celebración de la solemnidad de la Virgen Purísima Concepción patrona y reina de Celaya, en la homilía pidió a quienes hacen el mal regresar al camino del bien y no causar más dolor y muerte.
«Yo los invito a todos, primero a no perder la esperanza, sabemos que vivimos tiempos difíciles, todos lo estamos viviendo, lo vivimos los sacerdotes, lo viven los periodistas, lo viven la gente mayor, lo viven también los estudiantes, también las universidades, es decir, pues la violencia ha llegado a todos los rincones de la sociedad, o sea, nadie está exento de sufrir un acto violento».
«Yo invito a los hermanos que causan dolor, sufrimiento y muerte, los invito precisamente a que reconozcan que somos hermanos y que, todos queremos vivir en paz y que sepamos construir todos la sociedad, que nos involucremos en ser artesanos de la paz. Obviamente es importante que las autoridades de los tres niveles pongan lo que está en su parte porque también a ellos les corresponde la seguridad, pero también en esos tiempos difíciles yo invito a los jóvenes especialmente y a todos a cuidarnos».
Monseñor pidió a la población ser solidaria y evitar situaciones de riesgo.
«Hay que evitar situaciones de riesgo, ya no podemos vivir como antes, así como para andar a todas horas y en cualquier parte. Hay que estar muy al pendiente los papás de sus hijos, entre los jóvenes cuidarse, los vecinos, entre las colonias, pues, también hacer grupos de autocuidado, de vecinos de vigilancia, necesitamos aprender a vivir en circunstancias de dificultad».
«Finalmente a las familias, familiares de estos jóvenes, ya les hemos mandado palabras de consuelo, de ayuda y pedimos a Dios para que pronto encuentren consuelo. Sabemos que es difícil las pérdidas, especialmente cuando son humanas, pero desde Dios y con la presencia del Señor, pues, puede llevarse y soportarse y poder aceptar también esos momentos difíciles».