Celaya, Gto., por: Redacción.- El director del Museo de Historia Regional, Rafael Soldara Luna, señaló que un particular originario de Celaya intentó vender dos obras firmadas por el célebre arquitecto Francisco Eduardo Tresguerras, proceso que fue frenado.
Una de estas dos pinturas, dijo, corresponde a una imagen que se encontraba al interior de la Capilla de la Virgen de los Dolores.
El historiador explicó que entre muchas obras, al interior había una serie de 14 piezas sobre los apóstoles. Una de esas dos es la que ahora se intentaba vender.
“Me hicieron partícipe algunos investigadores de una posible salida a subasta de unas pinturas del arquitecto Francisco Eduardo Tresguerras, son dos pinturas y ambas están firmadas”.
“En nuestro catálogo de obras que tenemos monitoreada sí hay una de esas obras que presumiblemente estuvo en la capilla de la Virgen de los Dolores, es uno de los dos martirios de los apóstoles que están faltantes”.
Dijo que él ya sabía de la existencia de estas obras y que incluso había hablado con la persona que las posee.
“En algún momento habíamos entrado en contacto con los propietarios que legítimamente tienen la posesión de esta obra y les habíamos exhortado a que se acercaran a las autoridades del Instituto Nacional de Antropología e Historia para regularizar su situación porque finalmente aunque haya sido una extracción histórica, forma parte de un programa iconográfico de un monumento histórico y tienen que ser restituidas a su lugar de origen”.
“Han pasado los años y estos propietarios quieren continuar con esta iniciativa de la comercialización, por ello, por ética y por conocimiento lo más correcto fue haber dado parte al INAH como se hizo y estar en contacto con la subastadora para estar en contacto y alertarles”.
Dijo que afortunadamente la subastadora tomó la decisión de sacar de la comercialización estas obras, y que no va a publicarse en catálogos.
“Y se le hizo una carta al propietario nuevamente para que se dirija a las autoridades y regularice su situación. Es un riesgo que quiera comercializar esta obra porque puede proceder incluso un proceso de decomiso”.
Dijo que la última vez que aparece una de estas dos obras es en los inventarios de 1912 del Convento de San Francisco.
“Ya después no están, seguramente cuando el convento se convierte en cuartel se pierde un poco del control en algunos de los espacios y hay una línea de búsqueda, una persona que participa en la construcción de la colonia Cuauhtémoc que hoy conocemos como Alameda Hidalgo y su familia posee estos cuadros”.
“Quiero pensar que aprovechó el descontrol del convento y se hizo de esta pieza, estas piezas las hemos fotografiado, las hemos medido, yo las tuve físicamente en las manos y por ello hemos dado parte a las autoridades, esperando que el particular se sensibilice y regularice su situación”.