Si se habla de cuánto ha avanzado la civilización occidental, se suele tomar como referencia el Medievo, período histórico entre el siglo V y el siglo VI.
Aspectos como el pensamiento, la ciencia, la convivencia social y por supuesto, el sexo, son algunos de los más importantes y a continuación veremos algunas de las Características de la vida sexual en la Edad Media para así evaluar cuánto ha progresado.
Prostitución
La iglesia, en su afán por evitar el adulterio y la homosexualidad, durante mucho tiempo aprobó la prostitución. Las prostitutas llevaban prendas particulares que las identificaban y únicamente trabajaban en burdeles.
Celibato
El sexo no se permitía sino hasta el casamiento, las personas que tenían sexo antes de casarse, se les llamaba fornicadores y eran denunciados ante el sacerdote.
Profilácticos
La utilización de preservativos estaba únicamente relacionada con la prevención de enfermedades venéreas y nunca con la anticoncepción. Al principio eran trozos de vejigas o intestinos de animales, posteriormente comenzaron a elaborarse con lino.
La impotencia
Si algún hombre tenía problemas para satisfacer sexualmente a su mujer, había un grupo de mujeres consideradas sabias que examinaban el miembro viril y determinaban si el hombre sería capaz de procrear, si a los ojos de estas mujeres no lo era, esa pareja debía separarse.
La posición
El sexo oral o anal eran considerados pecado, ya que la iglesia solamente aceptaba la posición actualmente conocida como “el misionero” en la que el hombre está encima de la mujer, como la postura natural y correcta para el sexo. (Información: Grandes Medios)