Ante los asesinatos de niños que se suscitaron en la cuarta semana de mayo en el estado de Tabasco, el Obispo de la entidad, Monseñor Gerardo de Jesús Rojas López, reconoció que la inseguridad desplegada por operadores criminales “ya no tiene límites”.
En su mensaje dominical emitido en la mañana del 26 de mayo, el Obispo de Tabasco fue cuestionado por los casos de Dante Emiliano y de Darvin, dos niños de 12 y 7 años de edad que murieron luego de haber sido atacados a balazos en la zona donde vivían.
Al respecto, Rojas López admitió que eso se debe a los altos niveles de inseguridad que persisten en el estado, pero pidió no “culpar a nadie” en particular, ya que —según sus palabras— los diferentes sectores de la sociedad, como la Iglesia, tienen que poner de su parte para contribuir a a la formación de los jóvenes e infantes.
“Yo pienso que la inseguridad ha llegado a un momento en el que ya no tiene límites, pero no se trata de culpar a nadie, todos tenemos que poner nuestra responsabilidad. Los papás, formar a los niños, educarlos, saber con quién pueden estar y con quién no, porque son muchas versiones las que han aparecido en medios de comunicación que realmente no sabemos la razón o motivo que hay de fondo”, señaló el religioso.
Si bien reconoció la inseguridad que se vive en Tabasco, Gerardo de Jesús se limitó a pronunciarse sobre lo ocurrido con Dante Emiliano en el municipio de Paraíso. Y es que en un primer momento se difundió que el menor había sido atacado con un arma de fuego por defender a su madre de un supuesto intento de secuestro, pero posteriormente la Fiscalía estatal desmintió dicha versión.
“Ante el desconocimiento, no podemos dar un pronunciamiento. Lo que sí nos toca a nosotros como Iglesia es crear conciencia y responsabilidad”, aseveró
Asesinato de menores en Paraíso y Cárdenas
Fue el 21 de mayo cuando se dio a conocer que Dante Emiliano había sido agredido a balazos en la colonia León del municipio de Paraíso. En redes sociales circuló un video en el que se observa a unos hombres que intentan restablecer al niño, quien clama por su vida en gritos de desesperación.
Reportes preliminares indican que el menor recibió al menos tres disparos de arma de fuego cerca de la vivienda de su abuela, pero se desconoce la posible causa del ataque.
“Dado los avances alcanzados, se puede descartar la versión difundida sobre un posible intento de secuestro a la madre de la víctima, y que ese hubiera sido el motivo por el que se registró la agresión”, fue lo único que informó la Fiscalía estatal.
Respecto al caso de Darvin, la información ha sido más escasa. Medios locales señalan que los hechos ocurrieron en la noche del sábado 25 de mayo en una vivienda del ejido Francisco Trujillo García, en el municipio de Cárdenas, donde el niño de 7 años se encontraba en compañía de su hermano Misael, de 17 años.
Según reportes de El Heraldo de Tabasco, sujetos desconocidos atacaron de manera directa a Misael con un arma de fuego. Durante la agresión, Darvin también recibió disparos, ya que supuestamente intentó defender a su hermano. Ambos perdieron la vida.
Al igual que lo sucedido con Dante Emiliano, aún no se han esclarecido estos asesinatos y hasta el momento no hay personas detenidas.
De acuerdo con la organización Causa en Común, a lo largo de este 2024 los medios de comunicación nacionales han reportado el asesinato de 84 niños, niñas y adolescentes en territorio mexicano.