Ciudad de México.- El Instituto Nacional Electoral (INE) siempre pide recursos públicos de más a la Cámara de Diputados y, en los últimos cinco años, registra una sobrepresupuestación de 2 mil 817 millones de pesos.
El Informe Previo de Gestión de la Contraloría General del INE documenta cómo el organismo ha guardado 810 millones 409 mil pesos de ese presupuesto excedido para atender su pasivo laboral.
Así como 480 millones 525 mil pesos para infraestructura de los Módulos de Atención Ciudadana, donde se tramitan las credenciales de elector.
De 2011 a 2015, el órgano electoral registró en promedio una presupuestación excedida anual de 563.4 millones de pesos.
«Estos remanentes sugieren una tendencia poco eficiente en el ejercicio de recursos públicos, así como una sobrepresupuestación de algunos requerimientos», indica el informe de la Contraloría General, que fue conocido por los miembros del Consejo General en septiembre.
El INE ha regresado mil 526 millones de pesos a la Tesorería de la Federación, el 54 por ciento de los sobrantes presupuestales de esos cinco años.
El resto de los fondos son enviados a los fideicomisos de pasivo laboral y de infraestructura.
Sólo en 2015, el presupuesto remanente fue de 622 millones de pesos, de los cuales 488 millones fueron a la Tesorería y 134 millones para el pasivo laboral.
Para ese año, a diferencia de los anteriores, el INE no echó mano de los sobrantes de su fideicomiso de infraestructura, pues la Cámara de Diputados le aprobó una partida específica por 719 millones de pesos. (Información: Reforma)