Ciudad de México. Fuente: Infobae.- Cargar el celular cerca a la cama puede tener consecuencias negativas en la salud del propietario y los otros integrantes del hogar. Así lo confirmó un reciente estudio que encontró que estos dispositivos pueden acaparar gran cantidad de bacterias como las que tiene el inodoro del baño.
Asimismo, otro riesgo que tiene esta práctica común es que al momento de quedar completamente cargado no se desconecta de la corriente, lo que puede provocar un sobrecalentamiento y por consiguiente en un incendio.
Aunque pueda parecer una práctica inofensiva, los riesgos se deben considerar para preservar la salud de toda la familia y no comprometer la información guardada en el dispositivo.
Por qué no hay que cargar el celular en la habitación
No hay que cargar el celular en una habitación por las bacterias que puede irradiar en el ambiente donde siempre debe estar aseado para un óptimo descanso. Los investigadores del estudio sometieron docenas de estos dispositivos a microscopios y luz ultravioleta, descubriendo una alta concentración de la bacteria Pseudomonas aeruginosa.
Esta cepa, aunque generalmente inofensiva para personas sanas, puede ocasionar problemas como irritaciones en la piel, infecciones respiratorias, e incluso en casos graves, sepsis.
Lo alarmante es que esta bacteria se ha detectado en las heces de cucarachas, y su capacidad para reproducirse en ambientes cálidos y húmedos, como los que se encuentran en las sábanas y almohadas, convierte a la cama en un entorno perfecto para su proliferación.
Por su parte, la acumulación de gérmenes en un lugar tan íntimo como la cama puede derivar en problemas de salud con el tiempo, especialmente en personas con sistemas inmunitarios debilitados.
Por qué es un riesgo cargar el celular en la cama
Colocar a cargar el celular en la cama puede ser perjudicial para el propio dispositivo. El ambiente cálido, junto a la humedad del sudor y la respiración, puede acelerar el desgaste de componentes clave del teléfono, como la batería y los circuitos internos.
Además, al dejar el celular sobre una superficie blanda, como una almohada o colchón, se impide la adecuada disipación del calor generado durante su uso o mientras se está cargando, que aumenta el riesgo de sobrecalentamiento.
También, la exposición a la luz azul, especialmente en la cama antes de dormir, tiene un impacto directo en los ritmos circadianos del cuerpo.
Esta luz interfiere en la producción de melatonina, la hormona que regula el sueño, lo que dificulta conciliar el descanso. A largo plazo, este uso inadecuado del celular puede contribuir a la aparición de insomnio y otros trastornos del sueño.
Cómo evitar accidentes en el hogar.
Lo primero sugerido es nunca conectar ningún dispositivo cerca a la cama o a una fuente de agua, para evitar cortocircuitos y otros inconvenientes mayores.
Para proteger tanto la salud de la familia como la integridad del celular, los expertos recomiendan algunas medidas preventivas que pueden marcar una diferencia significativa:
- Limpieza diaria: Desinfectar el celular al menos una vez al día con paños desinfectantes o alcohol isopropílico para eliminar las bacterias acumuladas.
- Evitar su uso en la cama: Es mejor no cargar el celular ni otros dispositivos electrónicos en la cama. En su lugar, se sugiere colocarlo en una mesita o superficie alejada del contacto directo con las sábanas u otros elementos.
- Uso de fundas protectoras: Utilizar una funda y protector de pantalla puede ayudar a reducir la acumulación de gérmenes y el sobrecalentamiento del dispositivo.
Todos estos riesgos asociados convierten el uso y carga del celular en la cama en una práctica poco recomendable. Tomar conciencia de estos peligros y adoptar buenos hábitos puede mejorar la salud y el bienestar del dispositivo.
