Ciudad de México.- Ashlee Hattermann, adolescente estadounidense de 13 años de edad, que escapó de su casa para reunirse con un hombre a quien conoció por Internet, fue localizada en la Ciudad de México por la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), informó la Oficina del Sheriff del Condado de Harris, en esta ciudad de Texas.
La adolescente desapareció la mañana del viernes, después de que su madre la dejó en la escuela secundaria Thornton Middle School en Texas; algunos de los amigos de la niña la vieron ese día, pero en algún momento ella salió de la escuela y fue a una iglesia, donde persuadió a una mujer a que le comprara un boleto de autobús.
Ella convenció a una mujer de que estaba tratando de regresar a Laredo para reunirse con su familia".
La mañana del sábado, la mujer vio publicaciones en Facebook sobre la niña desaparecida y acudió a la policía después de darse cuenta de que había sido engañada. Tras esto, las autoridades rastrearon imágenes de cámaras de seguridad de la estación de autobuses de Katy, un suburbio al oeste de Houston, mostrando a la menor preparándose para abordar un autobús que se dirigía hacia el sur.
Inicialmente, las autoridades la rastrearon hasta Laredo en Tamaulipas, pero no pudieron confirmar que cruzó la frontera hasta el mediodía del domingo.
Una carta a sus padres
Aunque Ashlee dejó la escuela temprano el viernes, sus padres no descubrieron que su hija había desaparecido hasta la tarde de ese mismo día, cuando la escuela llamó para decir que sólo había asistido a una clase.
Los padres revisaron el cuarto de su hija y encontraron una nota en su habitación en la que indicaba que estaba en camino a conocer a un hombre con el que había estado hablando a través de internet a lo largo del último año.
Keith Hattermann dijo a la estación de televisión KHOU de Houston que, en la nota, su hija se refería al hombre de 29 años que había conocido a través de Internet, como “papá”. La nota decía: "Papá es dueño de mi cuerpo y mi alma".
Logró huir a pesar de ser castigada
Los padres de la menor ya habían descubierto, en mayo pasado, que su hija tenía contacto con el hombre y le quitaron entonces el teléfono y le limitaron el uso de internet.
Después de que la menor desapareció el viernes, una de sus amigas informó a la policía que ella había continuado comunicándose con el hombre a través de mensajes de texto desde la escuela en otro teléfono. Sus padres dijeron no tener idea de dónde había obtenido el segundo teléfono.