Celaya Gto. Por Gabriel Estrada Hernández.- ¡CELAYA ES UN RANCHO GRANDOTE!, si damas y caballeros lo dije, pero antes de que me cuelguen de los innombrables en el palo más alto permítanme explicar, está mal llamada sección Lo que nadie quiere leer tratara de desentrañar algunos de los misterios, quesos, cosas, casas, peros paras, porqués, (si es una cita de Arjona algún problema), de nuestra ciudad que la empequeñecen y hasta dan asco.

Antes de que brinquen con cosas de política: que el PAN, que el PRI, que mi abuelita en calzones sobre un triciclo, déjenme decirles que no va por ahí, la vida de una ciudad, su progreso no se mide por la competencia de sus políticos, ni por su cantidad de industria, ni porque si tiene un equipo en primera división (asunto con el que me meteré después).

El progreso de una ciudad se mide en su educación y cultura, en su conciencia cívica colectiva, en su apertura a formas de pensar, en su pluralidad, en la unión de sus ciudadanos ,en que tanto esta crece pero en su mente global, mueve al colectivo a hacer cosas extraordinarias y no quedarse nada más en él: ay es debería ser así, deberían hacer esto, deberían implementar lo otro y deberían , bla, bla, bla, bla, como viejita quejosa de iglesia (un saludo a las viejecitas quejosas).

Resumiendo, EN LO QUE NADIE QUIERE LEER exploraremos esa parte de Celaya, esos asuntirijillos que la frenan más que cualquier regidor maleta o burócrata ineficiente, pero analizando desde la premisa YO QUE PUEDO HACER PARA QUE CAMBIE, (si señores creían que podían solo ponerse a comentar y no moverse del asiento pues no) porque está comprobado que unidos somos más y que los likes en publicaciones de niños con cáncer son tan efectivos como ver a los chicos en el gimnasio desde el aparador comiendo empanadas de la Tia Guille.

El activismo de sillón es la mentira más grande que hay, nos da satisfacción y sentido de responsabilidad momentánea pero no cambia pinches nada, señores la suciedad se empieza a barrer desde la casa, nuestra mente , nuestros hábitos, eso que te diferencia a ti persona pensante y coqueta que me leé, al típico mamila que se la pasa culpando al gobierno, a la inflación , a la gasolina, a su trabajo y hasta la música banda de que su mundo no cambie.

MATENME, línchenme, miéntenmela, regálenme un jabón lleno de espinas de tuna si quieren, pero lo que nadie quiere leer dará lata un rato, no por molestar, si no para sacudirles al Hamster , porque luego parece que ya se murió, que entendamos de dónde venimos, para saber porque estamos como estamos, y como podemos eludir que en los años venideros Celaya deje de ser UN RANCHO GRANDOTE y podamos decir con orgullo somos un CIUDAD y no cualquiera, somos la orgullosa CELAYA que se levanta de las cenizas gracias y solo gracias a sus ciudadanos que nos dejamos de quejar y nos comenzamos a MOVER.

Muchas gracias gente aquí estaremos dándole duro contra el muro y macizo contra el piso, porque los pambazos no se van a hacer solos.

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