Ciudad de México.- Ante el inminente regreso a clases de los 35.7 millones de alumnos, el solicitar un crédito entre las instituciones financieras del país puede significar de momento un gasto extra en el bolsillo de los padres ya que la diferencia que se tiene que pagar al final puede ser de más de 100 por ciento, dependiendo el tipo de crédito elegido.
De acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) si se solicita un crédito de cinco mil pesos a un plazo de un año, dependiendo la institución y el tipo de financiamiento ya sea de nómina, personal, simple, microcrédito o tarjeta de crédito, la tasa de interés anual puede ser desde un 15 por ciento hasta 67 por ciento.
En el crédito de nómina de los bancos hay 16 productos, con tasas de interés anual de 56 por ciento y un Costo Anual Total de 157 por ciento, por lo que el pago total sería de seis mil 820 pesos, es decir pagaría mil 820 pesos más al final del año.
Si el crédito de nómina fuera con la banca de desarrollo es dónde pagaría el padre de familia menos, alrededor de 501 pesos al final del año.
En los créditos personales y créditos simples, son las Sofom nos reguladas en donde más caro le saldría ya que terminaría pagando dos mil 101 pesos más y mil 628 pesos más.
Un microcrédito es más barato obtenerlo en una unión de crédito ya que pagaría al final 774 pesos más.
Financiarse con una tarjeta de crédito en modo revolvente, es decir pagando poco más del mínimo, en un banco pagaría al final del año en total seis mil 272 pesos y en la Sofom no regulada mil 988 pesos.
La otra opción es pagar a meses sin intereses los útiles escolares, pero se recomienda hacerlo en periodos menores a seis meses, ya que si no el próximo año ante el inicio del nuevo ciclo escolar se estaría pagando todavía los útiles que ya se usaron.
La Procuraduría Federal del Consumidor estima que el gasto por padre de familia en la compra de útiles escolares oscila entre los mil 800 pesos a dos mil 700 pesos, y se duplica dependiendo los hijos en edad escolar.
