Ciudad de México.- Anayetzin Damaris Fragoso, la joven cuyo cuerpo fue hallado en un clóset el domingo, tenía dos meses de embarazo, reveló la necropsia; las 16 heridas con navaja que le quitaron la vida fueron asestadas todas en el vientre, por lo que las autoridades mantienen como principal sospechoso a su pareja sentimental, Omar Arreola, quien se encuentra prófugo.
Anayetzin era estudiante de Ingeniería en Control y Automatización en ESIME Zacatenco y actualmente se encontraba en vías de titularse.
La línea de investigación apunta a que Arreola, al enterarse de que Anayetzin estaba embarazada, aparentemente no quiso asumir su responsabilidad y la atacó hasta matarla.
Los familiares de la joven detallaron a las autoridades encargadas del caso, que por lo menos en dos ocasiones Omar la había golpeado, por lo que establecieron una serie de protocolos cada vez que salía con él; por tal motivo, en cuanto no se comunicó solicitaron su búsqueda y exigieron su detención.
Trascendió que el presunto responsable vive en el Estado de México, por lo que la Procuraduría capitalina trabaja de la mano con su homóloga en esa entidad.
Los agentes investigadores ya tuvieron un acercamiento con los familiares de Omar y estos proporcionaron varias direcciones de sus parientes y amigos en otros estados, donde se cree, el imputado pueda estar escondido y prófugo de la ley.
La pareja tenía poco más de dos años de salir y fue a inicios de este 2017 que Omar cambió su actitud con la joven, la celaba y en dos ocasiones la golpeó, según consta en actas de la procuraduría capitalina.
Sus padres lo sabían, e incluso, tuvieron una plática con él quien les prometió que nunca más la golpearía, por eso permitieron que la relación siguiera. Se cree que en esta última cita, Anayetzin Damaris le informó que ambos esperaban un hijo y la respuesta no fue lo que esperaba; ahora las autoridades buscan a un feminicida más.
Con información de La Saga
